El Efecto Mariposa, reflexiones de Mercedes Cuñetti
Efecto Mariposa
Mensaje redactado para Radio Uruguay, programa conducido por Daiana Rodríguez y Alberto Gallo
Punta del Este, 17 de Agosto de 2020
Agradezco la oportunidad de intervenir en el aniversario del programa Efecto Mariposa.
Quisiera expresar un deseo y compartirlo con los oyentes. Un efecto mariposa leve, donde cabe todo y donde todo es posible y que se extienda suavemente pero en forma directa a los corazones de los que están escuchando, sean uruguayos, argentinos o de cualquier nacionalidad, a todos en general.
Pienso que si el virus que padecemos no tiene fronteras ni tampoco el aire ni las corrientes marinas, entonces tampoco debiera tener fronteras el mundo con el que sueño.
Quisiera que cada persona logre ser feliz y pueda desarrollarse con plenitud en el lugar que le tocó nacer. Y si viaja o emigra que no sea por buscar libertad, justicia social o por falta de trabajo sino para conocer otros lugares, otras culturas con costumbres y creencias diferentes, y de esa manera comprender que hay mucho de común entre todos los seres humanos.
El mundo globalizado debe servir para integrarnos en comunidad pacífica. Siendo de diferentes razas, credos y costumbres se pueden compartir trabajos interdisciplinarios para bien de la humanidad y donde lo que más importa es el conocimiento, la creatividad, la empatía y la comunicación, y así desarrollar la ciencia, la tecnología, las industrias, las profesiones, los oficios, los deportes y sobre todo las artes, que unen a los seres humanos de manera espiritual por encima de toda comprensión.
Integrarnos no significa perder la identidad del lugar al que cada uno pertenece. Estar orgullosos del país que tenemos, con nuestros símbolos propios, ser respetados por nuestra nacionalidad, respetando a los demás de la misma manera.
Siendo el hombre el mayor depredador del planeta, tenemos que ser conscientes y responsables día por día, porque nos da cobijo para vivir en él. No depredar, no contaminar, no ensuciar, ni despilfarrar. Ser conscientes de que por más lujo y confort que se tenga al final dependemos de la tierra, el aire y el agua para nuestra vida y nuestro sustento.
¡Qué inútiles que son las guerras tan devastadoras y destructivas! Cuánta pérdida de seres humanos. También con los incendios forestales. Recordar el del Amazonas no hace mucho, pulmón verde del planeta, ardió provocando la destrucción de especies animales y vegetales y además de sistemas de vida y de sustento de los habitantes nativos de la zona.
El efecto invernadero y el debilitamiento de la capa de ozono que tuvo como consecuencia el aumento de la temperatura promedio de la Tierra, los científicos pronostican que para este fin de siglo desaparecerán por lo menos diez países por el aumento del nivel de las aguas.
¡Cuántos problemas que nos competen a todos y que hay que solucionar y no queda otra forma que debe de hacerse en base a acuerdos, por consenso entre las naciones. Cuánto antes se entienda eso, mejor. No son necesarios ni los exterminios ni los fanatismos.
Buscar soluciones inteligentes, consensuadas. Hablar para entenderse y saber escuchar para comprender. Llegar a los acuerdos y cumplirlos. Esa acción debe ser lo antes posible.
Creo que la riqueza más grande de una nación es su pueblo. Por eso es tan importante la educación, la salud y las condiciones de vida para el sustento y el trabajo con justicia social. Los gobernantes representan y deben estar al servicio de su pueblo y no atornillarse al poder indefinidamente y en forma autoritaria.
Mi sueño es que cada persona de acuerdo con sus ideales de vida se ponga la camiseta de Efecto mariposa con mucho más convicción de la que alienta al equipo de football del país en los campeonatos mundiales.
La diferencia es en este caso, que el campeonato lo ganamos activamente entre todos de manera anónima. Trascender cada uno desde su lugar de vida donde cumple su destino; siendo mejores personas con amor y comprensión hacia los que son o piensan diferente.
Ser críticos y tener sentido común.
Cuidar el medio ambiente.
Sacralizar y honrar la vida que nos fué dada.
Soy consciente de que sueño un efecto mariposa enorme.
Me llamo Mercedes, tenga ochenta y dos años, vivo sola.
Que sean muy felices, gracias por escucharme y por permitirme expresarme.

