Reborati, Giacomo
Giacomo Reborati
Génova, 14 de Septiembre de 1864 - Montevideo, 4 de Mayo de 1941
Emigrante italiano radicado en Uruguay, viajó en la diligencia La Comercial del Este en 1905.
Fragmentos de la historia de la familia Reborati en América, redactada en 2005 por Virginia Abril Reborati y Dora Reborati, nieta e hija de Alberto Reborati, hijo de Don Giacomo Reborati:
La familia Reborati vino a Uruguay desde Génova, Italia, en el año 1900. Se componía de cuatro personas: el padre Giacomo Reborati, la madre María Batiste de Reborati, y sus hijos Elvira de 9 años y Alberto Jerónimo de 7 años.
Alberto J. se educa en el Seminario, en cuyos archivos se puede encontrar la ficha con los datos como alumno y fotos de fin de curso. Luego cursa la Facultad de Arquitectura hasta 4to. Año, pues problemas financieros en la familia lo obligan a emplearse en la Intendencia de Montevideo como dibujante. Fue ayudante del Arq. Leopoldo Tossi. Luego comenzará a realizar pequeñas obras con un capataz de origen italiano, como él, quien tenía experiencia en el oficio. De esta época anterior a la sociedad con Bello, hay dos casas gemelas en la calle Francisco Vidal entre Solano Antuña y 21 de Setiembre, construidas por encargo de su cuñado Rodolfo da Silva para la Fábrica de Café "Dos Americanos", firmadas “Alberto J. Reborati”. También construyó en esa época casas en la zona de Colón y del Prado, para familiares y amigos, como es el caso de la primera etapa de la casa de Vaz Ferreira en el Prado. Los horarios de clases y los compromisos asumidos por estos trabajos, le impiden continuar sus estudios en Facultad, por esa razón nunca se recibe.
En el año 1929 la familia pasó a vivir en la calle Solano Antuña 2886 (numeración original de la casa y actualmente 2882). El Portón de reja en la parte superior decía: "PORTOFINO", lugar de veraneo de la familia en Italia. Los vitraux de toda la casa fueron hechos en base a dibujos de Giacomo. El vitraux del hall de entrada representa el Castillo de Paraggi, localidad cercana a Portofino, donde la familia veraneaba cuando vivían en Italia.
Uno de los recuerdos de la casa es cuando en el año 1934, vino el Graff Zeppelín, un dirigible alemán de color plateado. Alberto Reborati cargó a babucha a su padre, Giacomo, que ya estaba paralítico, hasta la torre, o sea tres pisos, para que lo pudiera ver. Pasó tan cerca que veíamos a la gente agitando pañuelos.
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Dice la biografía del pintor uruguayo Guillermo Rodríguez (quien contrajo matrimonio con Elvira Reborati el 13 de Enero de 1919, con quien tuvo dos hijos, Guillermo y Sara), sobre su suegro: "Culto comerciante y también hábil dibujante aficionado; Giacomo Reborati realiza una pequeña exposición en Punta del Este en 1916 donde veraneaba, de temas locales. Ya en su Génova había dibujado como “dilettanti”. Luego de su enlace en Génova con la uruguaya María Battiste, se instalaron en Montevideo por 1902 definitivamente. Y aquí en su nueva patria supo dibujar como aficionado en lápices crayola temas de Maldonado y locales. Prosigue así un ámbito familiar de comprensión artística y estímulo, para el joven pintor Guillermo C. Rodríguez."
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