El misterio del reloj solar de Maldonado
A esta altura corresponde aclarar que nuestro amigo Alberto Moroy es uruguayísimo, pero reside en Argentina. Como los lectores saben, tiene una abultada biblioteca y sabe usar como pocos a esa enciclopedia viva que es internet. Pero en casos como este, en que no puede hacer el trabajo de campo irremediablemente necesario, la curiosidad dio sus frutos y a la interrogante del corresponsal respondió amablemente Lidey Sosa, contándonos que el Reloj de Sol se encuentra en el Museo Mazzoni de la ciudad de Maldonado, en el patio interior. Fue donado al profesor Mazzoni con otra gran cantidad de piezas existentes en la iglesia.
En la portada el cuadrante de un reloj de sol Vertical, bastante habitual en los frentes de muchas iglesias europeas, aunque no tan decorados. Nuestro reloj es otro y arribó al Rio de la Plata por el año 1775 y su cuadrante es Sur, por lo que podemos decir que era para estos pagos. No sabemos su destino original, ni como, ni para quien, la cuestión es que apareció en la Catedral de Maldonado por el año 1900, camuflado en una Pila Bautismal, según lo describe mas abajo el Presbítero Roman Maritorena a principios de siglo XX.
Por su forma nunca formo parte de una iglesia, tal vez si del fuerte que distaba a pocos metros al Sur de la manzana que se levanta la actual Catedral o de plaza publica de Maldonado. La propuesta es encontrarlo, decía Alberto y poco después su curiosidad quedó satisfecha. Pero el proceso del encuentro es interesante. Para eso nos iremos interiorizando sobre lo que salió publicado en 1935 en la revista llamada sociedad «Amigos de la Arqueología» tomo VI.
El misterio del reloj solar de Maldonado, la no menos misteriosa pila bautismal que quizá fue un reloj en su origen
Por Alberto Moroy
Como misterio antes de entrar en tema, les adjunto un pasaje referido a las pilas bautismales de la iglesia de San Carlos, fíjense donde dice que una de ellas (ref. a Maldonado) sirvió de bebedero para las aves de un antiguo vecino ¿Será ésta?
El cuartel de Dragones
El Cuartel de Dragones fue una construcción de carácter militar, iniciada en el año 1771 a 1797, por iniciativa del Español Bartolomé Howel, la estructura es de paredes de piedra de sillería labrada y barro, inicialmente los techos fueron de paja y en los sectores que aún hoy se conservan son de tejas, apoyadas en vigas de madera. Su superficie de 2.500 metros cuadrados abarca toda una manzana. La denominación popular fue de Cuartel de Dragones o de Blandengues evocando a los principales cuerpos que allí se alojaron. Nuestro prócer nacional el General José Gervasio Artigas ingresa al cuerpo Veterano de Blandengues tomando estado militar el 10 de marzo de 1797, agregándole aun más importancia histórica a este ya valioso edificio con herencia propia La Capilla del Cuartel se encuentra ubicada dentro del propio edificio de carácter castrense y fue inaugurada oficialmente el 2 de febrero de 1801 por el cura párroco Dr. Dámaso Gómez de Fonseca. El emplazamiento sufrió el ataque y consiguiente defensa en las invasiones inglesas resultando el lugar menos dañado la anteriormente mencionada capilla.
Vale la pena aclarar que Bartolomé Howel, no era español, sino francés al servicio de Portugal, su verdadero nombre y apellido era Jean Barthelemi Havelle y en Brasil durante la construcción de fortificaciones en Rio de Janeiro, se llamaba Joao Bartolomé Houel.
Sobre Jean Barthelemi Havelle (Bartolomé Howel)
Juan fue cambiando de nombre según le convino, ingeniero francés al servicio del rey de portugués desde 1750 que trabajó en la Comisión de Limites y sobre todo en la fortificación de Rio de Janeiro durante nueve años. Luego fue destinado a Colonia del Sacramento para reforzar las fortificaciones. Cuando Cevallos tomó la plaza lo encontró allí y le ofreció pasarse al servicio del rey español Havelle aceptó y fue encargado allí mismo de reparar los daño del ataque a Colonia, siendo luego destinado a Buenos Aires, Montevideo y Maldonado e incorporándose al Real Cuerpo de Ingenieros Militares de España.
«… quien revistaba en la guarnición luso-brasileña de esa plaza, y ante una proposición del gobernador bonaerense accedió a incorporarse al servicio del Rey de España en la dotación del Real Cuerpo de Ingenieros de Buenos Aires; de este modo la habilidad de Cevallos permitió ganar para la ingeniería militar rioplatense a una de las figuras de mayor relieve profesional, evidenciado en obras como las fortificaciones de Montevideo y Colonia; el Fuerte de Santa Teresa, el Cuartel de Dragones de Maldonado.
La catedral
Se inauguró en 1895 pero había comenzado a construirse en 1801 cuando cinco años más tarde debió interrumpirse debido a las invasiones inglesas. Finalmente el Obispo diocesano Mariano Soler, a las 9:20 de la mañana del 27 de Octubre de 1895, dio lectura al acta que recibía de manos de la Junta Político Administrativa, el templo al que se le denominó Catedral San Fernando de Maldonado.
Consta de una nave principal con dos campanarios y una cúpula central. A los costados y al fondo de esta nave se disponen dos edificios pequeños que completan la forma de cruz del conjunto. El altar mayor es obra del escultor Antonio Veiga quien obtuvo un premio por este trabajo en la exposición Continental de Buenos Aires en 1882. La campana original había sido donada en Buenos Aires y tenía un peso de 150 Kg. La catedral fue declarada patrimonio histórico de la Nación y se la ha restaurado completamente.
Reloj solar moderno en Punta del Este
Hace poco tiempo (2006) Punta del Este tuvo su primer reloj de sol. Se trata de un reloj solar emplazado en una plazoleta de la rambla puntaesteña, en su intersección con la calle 4, una de las particularidades de este tipo de relojes, es que cualquier persona, con solo pararse en el lugar indicado en el piso, según la fecha y otros parámetros claramente descriptos, puede obtener la hora exacta. Agó Páez Vilaró explicó que el reloj consiste en una estructura de cemento pintada de azul y amarillo con agujas de acero, colocada a nivel del suelo. Páez Vilaró destacó la relevancia de que el funcionamiento del reloj determina que sólo da la hora si uno se para encima y señaló que visitarlo es una buena oportunidad para acercarse a la relación que nuestros antepasados tenían con el tiempo.
Reloj Anemático (Punta del Este) / Reloj solar vertical
En la antigüedad los relojes de sol tenían una amplia propagación. Los obeliscos altos y esbeltos del Egipto antiguo servían de indicadores del reloj de Sol. En la India los peregrinos tenían bastones con relojes de sol en miniatura incrustados en ellos. Un reloj de sol grande fue instalado en la «Torre de los Vientos» en Atenas. En Roma Antigua el emperador Augusto en el Campo de Marte ordenó colocar a título de indicador del reloj de sol el obelisco a Sesostris (Ramsés II) de 34 m de altura que sacó entre los otros trofeos militares de Egipto. Es un instrumento usado desde tiempos muy remotos con el fin de medir el paso de las horas, minutos y segundos (tiempo). Se le denomina también cuadrante solar. Emplea la sombra arrojada por un gnomon o estilo sobre una superficie con una escala para indicar la posición del Sol en el movimiento diurno. Según la disposición del gnomon y de la forma de la escala se puede medir diferentes tipos de tiempo, siendo el más habitual el tiempo solar aparente.
Presbítero Román Maritorena (relato de época)
Al alborear el presente siglo (XX), las vecinas poblaciones de Maldonado, celebraban así casi al mismo tiempo dos magnos acontecimientos de interés local, festejaba San Carlos el primer Centenario de la habilitación de su templo y Maldonado inauguraba su nueva iglesia, comenzada en la época colonial. Quiso el Sr. Francisco Piria, con tal motivo, asociarse al alborozo de los pueblos confundiéndolos en uno mismo y regaló a San Carlos dos hermosos cuadros de arte y a Maldonado dos hermosos cuadros de arte y a Maldonado una monumental Pila Bautismal, que sin discusión es la mas valiosa de la república.
Este preámbulo conduce al lector hacia el conocimiento de una piedra de mármol que hasta la fecha referida sirviera de Pila Baustimal en la vieja iglesia de San Fernando de Maldonado, desde un tiempo difícil de recordar. Esta piedra fotograbada sirve para convencerse que la misma no fue labrada para ese fin, como se desprende de su forma e inscripción.
Es indudable que fue construida para servir de tabla marcadora de las horas en un cuadrante solar. Lo indica así la numeración en números romanos, que aparece en su cara superior y la inscripción de su borde anterior, leída de izquierda a derecha.
¿Cómo se traduce esta leyenda?
Para interpretarla con acierto se requiere antes averiguar la clase de proyección del cuadrante construido. Y esa proyección se desprende primeramente de la proyección horizontal que supone su construcción, ya que descansaba sobre un pie vertical, también de mármol de la misma especie, en que estaba ajustada por una espiga saliente del centro de su figura en su cara inferior. Además basta observar el plano de la tabla del cuadrante y resulta:
1º Que la recta VI - VI y la del punto medio de ella, baja hasta el punto de la hora XII, son perpendiculares entre si.
2ª Que si con un radio cualquiera trazamos desde el punto medio de la recta VI como centro, una circunferencia que corre las líneas, en cuyas extremidades figuran las distintas horas del cuadrante, los ángulos resultantes son desiguales entre si, aunque equidistantes dos a dos a ambos lados de la meridiana luego el cuadrante era de proyección horizontal.
Con estos antecedentes, fácil nos parece interpretación de la leyenda a saber: horizontal, cuadrante Sur determinado y fecha en el año 1775 de Jesucristo.
En octubre llamamos la atención sobre el deterioro que revela la simple observación del ultimo signo, que es el referente al mes de la fecha consignada, pero debiendo comenzar el nombre de dicho mes con la letra O, según el signo es lógico deducir que se trata de Octubre.
¿Y cual fue el lugar en que el cuádrate desempeño su prístina función? Difícil sería resolver el problema, pero bien podría suponérsele colocado en la plaza pública de Maldonado, bien en el fuerte, que distaba poco metros al sur de la manzana que se levanta la iglesia actual o bien en algún otro lugar apropiado, ya que para nuestros mayores la hora solar era la oficial para los usos de la vida civil.
Es lamentable constatar en el centro del cuadrante, un corte hecho en forma de pirámide cuadrangular truncada y practicado con el intento de adaptarlo a su nuevo servicio de pila bautismal. Pero esta que yo me atrevo a designar como pequeña herejía artística, hay que saber disculparla a nuestros antepasados. En efecto, el entusiasmo en las principales naciones civilizadas, de arreglar los relojes públicos.
Este objeto tan precioso, si atendemos a lo reducido que hasta la fecha es el caudal arqueológico del país, esta hoy en poder de la parroquia de Maldonado. Allí lo hallamos en un patio y muy próximo al lugar en que todavía permanece clavado verticalmente en el suelo el pie e mármol, a que mas arriba se hace referencia.
Conclusión
Seria interesante que alguien confirme si dicha pila bautismal, todavía se encuentra en la Catedral de Maldonado y ya que estamos también se podría averiguar cuáles fueron los cuadros donados por Piria a la de San Carlos. De paso convendría ver si la pila bautismal del ano 1775 donada por Francisco Sebastián de Malaver Pinto se encuentra en esa (San Carlos). Asumamos que el reloj es de factura europea, arribo a Uruguay en una fecha cercana y posterior a 1775.
De los edificios existentes solo dos coinciden con esta fecha, no obstante la Parroquia de San Carlos habría que descartarla ya que en 1775 todavía su construcción era precaria y además nueve años después (1784) casi no tenia pobladores. Nos queda el Cuartel de Dragones (1771), sin dudas un lugar probable, aunque fue terminado en 1797.
Visto así, el sitio posible debió de haber sido la plaza de Maldonado. Sin dudas un acontecimiento que marcó la historia fueron las invasiones inglesas. Los invasores se apoderan de Maldonado con asombrosa facilidad el 20 de Octubre de 1806, sometiéndola al saqueo durante tres días y tres noches, permaneciendo dos meses en el pueblo de Maldonado. Sería entonces probable que alguien en prevención la haya guardado y tal vez esto coincida o no con el comentario de que estuvo un buen tiempo en un gallinero. Sería más que interesante si todavía existe esta pila bautismal, ponerla en valor (reloj) y destinarla al espacio publico (plaza de Maldonado) reconstruyendo su cuadrante no muy difícil sobre todo basándose en lo aportado por Maritorena.
El museo Mazzoni de Maldonado y el misterio de la pila bautismal
Francisco Mazzoni (1883-1978) fue un escritor, historiador, periodista, músico y docente que vivió la mayor parte de su vida en Maldonado. Durante años fue coleccionando diversos objetos de la época colonial y prehispánica. Después de visitar la exposición de París de 1937, organizó un museo en su propia casa, un antiguo caserón del siglo XVIII que había pertenecido a la familia Fajardo, residencia de doce habitaciones ambientada con muebles de época, pisos en forma de dameros y madera, una galería vidriada. En 1969 lo donó al Estado.
Esta introducción sirve para una pequeña y fascínate historia, de una pila bautismal que pocos saben su origen, si así fuese el lugar y destaque en el museo sería otro.
Antes estuvo en la Catedral de Maldonado, aunque su origen era un reloj solar, posiblemente ubicado en el Cuartel de Dragones o Blandengues (1771) construido por ordenes de Juan José de Vértiz, gobernador de Buenos Aires y terminado en 1797. La catedral de Maldonado se inauguró en 1895 pero había comenzado a construirse en 1801 cuando cinco años más tarde debió interrumpirse debido a las invasiones inglesas.
Según el Presbítero Román Maritorena (relato de época): “Al alborear el presente siglo (XX), las vecinas poblaciones de Maldonado celebraban casi al mismo tiempo dos magnos acontecimientos de interés local; festejaba San Carlos el primer Centenario de la habilitación de su templo y Maldonado inauguraba su nueva iglesia, comenzada en la época colonial. Quiso el Sr. Francisco Piria, con tal motivo, asociarse al alborozo de los pueblos y regaló a San Carlos dos hermosos cuadros de arte y a Maldonado una monumental Pila Bautismal, que había sido donada por Sebastián de Malaver Pinto (Obispo de Buenos Aires 1779) y sin discusión es la más valiosa de la república”.
La pila bautismal del año 1775 posiblemente abandonada por décadas después de las invasiones Inglesas y rescatada en un gallinero por Francisco Piria. Asumamos que el reloj es de factura europea, que arribó a Uruguay en una fecha cercana y posterior a 1775, tal vez la trajo consigo el obispo cuando llegó a Montevideo el 28 de diciembre de 1778, procedente de La Coruña. Esta piedra sirve para convencerse que la misma no fue labrada como pila bautismal, como se desprende de su forma e inscripción. Es indudable que fue construida para servir de tabla marcadora de las horas en un cuadrante solar. Lo indica así la numeración en números romanos, que aparece en su cara superior y la inscripción de su borde anterior, leída de izquierda a derecha.
Si andan por Punta del Este no está de más una vista al museo Mazzoni. Dirección: Ituzaingó 789, Maldonado, Teléfono: +598 4222 1107.
Estas notas, que el BHL transcribe agradeciendo la gentileza del autor, Alberto Moroy, fueron publicadas la primera en el diario El País el 19 de agosto de 2011 y la segunda en 2021.
amoroy@gmail.com
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Aporte del Dr. Mario Scasso Burghi: |
La asociación de la pila bautismal de la Capilla de Aguilar, en realidad un reloj de sol reutilizado, con Francisco Piria es fantástica. Piria nació en 1847 y la capilla de Aguilar estaba en funciones desde 1835. Se utilizó hasta 1895. Piria hacía poco que se relacionaba a la zona Este. La amistad era con el Párroco de San Fernando de Maldonado, Pbro. Pedro Podestá, tal vez con un vínculo establecido a través de la masonería. A él sí le donó la pila bautismal de mármol de la actual Catedral Fernandina. |